jueves, 11 de junio de 2020

Entrevista capotiana a Pablo Rivero


En 1972, Truman Capote publicó un original texto que venía a ser la autobiografía que nunca escribió. Lo tituló «Autorretrato» (en Los perros ladran, Anagrama, 1999), y en él se entrevistaba a sí mismo con astucia y brillantez. Aquellas preguntas que sirvieron para proclamar sus frustraciones, deseos y costumbres, ahora, extraídas en su mayor parte, forman la siguiente «entrevista capotiana», con la que conoceremos la otra cara, la de la vida, de Pablo Rivero. 

Si tuviera que vivir en un solo lugar, sin poder salir jamás de él, ¿cuál elegiría? 
Mi casa.
¿Prefiere los animales a la gente? 
Hay personas que son verdaderos animales, por no decir bestias, pero todavía tengo esperanza en el ser humano. 
¿Es usted cruel? 
Solo cuando escribo, porque sé que a los que nos gusta la novela negra lo agradecemos.
¿Tiene muchos amigos? 
Sí, tengo mucha suerte.
¿Qué cualidades busca en sus amigos? 
La normalidad, que sean buena gente. La sencillez. 
¿Suelen decepcionarle sus amigos? 
No, con la madurez he aprendido a relativizar y a querer más y exigir menos.
¿Es usted una persona sincera? 
Lo intento, sí. 
¿Cómo prefiere ocupar su tiempo libre? 
Disfrutando de mi familia. 
¿Qué le da más miedo? 
La enfermedad y que falten los que quiero. 
¿Qué le escandaliza, si es que hay algo que le escandalice? 
La actitud de nuestros políticos, las barbaridades que se dicen y la falta de respeto hacia el pueblo en general. Toda su energía está en justificar las burradas de unos y otros y enfrentar a la gente.
Si no hubiera decidido ser escritor, llevar una vida creativa, ¿qué habría hecho? 
De pequeño siempre decía que quería contar historias, hay muchas maneras... me hubiera encantado ser pintor, fotógrafo, cantar y bailar bien... 
¿Practica algún tipo de ejercicio físico? 
Desde hace cosa de tres años prácticamente nada y me pasa factura. 
¿Sabe cocinar? 
Lo justo, me gusta cocinar pero cosas sencillas nada muy elaborado. 
Si el Reader’s Digest le encargara escribir uno de esos artículos sobre «un personaje inolvidable», ¿a quién elegiría? 
Me gustaría hacerlo sobre Hitchcock clara influencia en la trama de Penitencia.
¿Cuál es, en cualquier idioma, la palabra más llena de esperanza? 
PAZ.
¿Y la más peligrosa? 
Odio. 
¿Alguna vez ha querido matar a alguien? 
A una vecina que me hacía la vida imposible y que inspiró el arranque de Penitencia.
¿Cuáles son sus tendencias políticas? 
Prefiero no contestar a eso más que nada porque a día de hoy estoy tan decepcionado que no creo que ningún partido se merezca alabanzas.
Si pudiera ser otra cosa, ¿qué le gustaría ser? 
Es que no quiero cambiarlo! Me gustaría tener gente que esté esperando mis historias y poder escribir pensando en ellos y después compartir impresiones. 
¿Cuáles son sus vicios principales? 
Ahora mismo las plantas, empezé comprando plantas pequeñas y he acabado teniendo un bosque en mi jardín. Me dan la vida. 
¿Y sus virtudes? 
Creo que soy bastante currante, majo y con bastante sentido del humor. 
Imagine que se está ahogando. ¿Qué imágenes, dentro del esquema clásico, le pasarían por la cabeza?  
Las caras de familia, de mis amigos... 
T. M.