jueves, 28 de enero de 2021

Entrevista capotiana a Ángela Álvarez Sáez

En 1972, Truman Capote publicó un original texto que venía a ser la autobiografía que nunca escribió. Lo tituló «Autorretrato» (en Los perros ladran, Anagrama, 1999), y en él se entrevistaba a sí mismo con astucia y brillantez. Aquellas preguntas que sirvieron para proclamar sus frustraciones, deseos y costumbres, ahora, extraídas en su mayor parte, forman la siguiente «entrevista capotiana», con la que conoceremos la otra cara, la de la vida, de Ángela Álvarez Sáez.

Si tuviera que vivir en un solo lugar, sin poder salir jamás de él, ¿cuál elegiría? El planeta Tierra. Nunca he querido ser astronauta.

¿Prefiere los animales a la gente? No.

¿Es usted cruel? Espero no serlo.

¿Tiene muchos amigos? En la vida real pocos. En Facebook sí tengo bastantes, pero eso, como la poesía, es otra cosa. 

¿Qué cualidades busca en sus amigos? Que les guste ser mis amigos.

¿Suelen decepcionarle sus amigos? No. 

¿Es usted una persona sincera? Sí, que no maleducada. Suelo guardarme mis opiniones si sólo voy a conseguir hacer daño a la otra persona.

¿Cómo prefiere ocupar su tiempo libre? Leer. Escribir. Viajar. Ver series y películas. Jugar con mis hijas.

¿Qué le da más miedo? La muerte. 

¿Qué le escandaliza, si es que hay algo que le escandalice? La necedad.

Si no hubiera decidido ser escritor, llevar una vida creativa, ¿qué habría hecho? Ser rentista.

¿Practica algún tipo de ejercicio físico? Andar a diario. El paseo ensancha el pensamiento.

¿Sabe cocinar? No me gusta, se tarda mucho en cocinar, prefiero comer algo que haya cocinado otro e invertir mi tiempo en otra cosa.

Si el Reader’s Digest le encargara escribir uno de esos artículos sobre «un personaje inolvidable», ¿a quién elegiría? Imposible elegir uno. No soy nada fetichista ni mitómana, por lo que me costaría reducir mi artículo a uno solo.

¿Cuál es, en cualquier idioma, la palabra más llena de esperanza? Esperanza.

¿Y la más peligrosa? Miedo.

¿Alguna vez ha querido matar a alguien? Nunca.

¿Cuáles son sus tendencias políticas? Mi abuelo decía que era de mala educación hablar de política o de dinero.

Si pudiera ser otra cosa, ¿qué le gustaría ser? Científica. 

¿Cuáles son sus vicios principales? Unos cuantos, soy bastante hedonista, pero no son confesables en una entrevista pública.

¿Y sus virtudes? Una pena que mis abuelas ya no vivan porque seguro que ellas contestaban esta pregunta de buena gana.

Imagine que se está ahogando. ¿Qué imágenes, dentro del esquema clásico, le pasarían por la cabeza? Morir ahogado es uno de mis mayores miedos, debe ser angustioso. Por eso creo que en ese momento no me pasarían por la cabeza imágenes bucólicas como el bosque por el que paseaba de niña con mis padres o el rostro angelical de mis hijas. Creo que en ese momento sólo existiría la vida o la muerte, la lucha por la supervivencia.

T. M.