jueves, 3 de agosto de 2023

Entrevista capotiana a Javier Fuentes

En 1972, Truman Capote publicó un original texto que venía a ser la autobiografía que nunca escribió. Lo tituló «Autorretrato» (en Los perros ladran, Anagrama, 1999), y en él se entrevistaba a sí mismo con astucia y brillantez. Aquellas preguntas que sirvieron para proclamar sus frustraciones, deseos y costumbres, ahora, extraídas en su mayor parte, forman la siguiente «entrevista capotiana», con la que conoceremos la otra cara, la de la vida, de Javier Fuentes.

Si tuviera que vivir en un solo lugar, sin poder salir jamás de él, ¿cuál elegiría? El campo de al lado de mi casa.

¿Prefiere los animales a la gente? Todavía, afortunadamente, no he llegado a ese extremo. Aunque no puedo imaginar un mejor compañero para escribir y pasear que Friend, mi schnauzer miniatura.

¿Es usted cruel? No.

¿Tiene muchos amigos? La verdad es que tengo bastantes y buenos amigos. No se todavía si es una bendición o una maldición pero al llevar tanto tiempo viviendo en Nueva York, la mayoría se han ido de la ciudad y están dispersados por el mundo.

¿Qué cualidad busca en sus amigos? Sobre todo que me inspiren a ser mejor persona y a crecer como escritor.

¿Suelen decepcionarle sus amigos? Rara vez.

¿Es usted una persona sincera? Sobre todo cuando escribo.

¿Cómo prefiere ocupar su tiempo libre? Afortunadamente leyendo y escribiendo. También disfruto visitando galerías de arte, caminando por el campo, haciendo deporte, y viajando.

¿Qué le da más miedo? Por ahora, la muerte. Pero estoy trabajando en ello.

¿Qué le escandaliza, si es que hay algo que le escandalice? La corrupción política me parece avergonzante. Es difícil creer en el futuro cuando estamos en las manos de una clase política tan mediocre.

Si no hubiera sido escritor, llevar una vida creativa, ¿qué habría hecho? La verdad que no puedo imaginarme no llevar una vida creativa. Antes de dedicarme a la escritura trabajé de director creativo para agencias creativas de comunicación y para marcas. Para mí la creatividad es sinónimo de inspiración y no me puedo imaginar la vida sin ella.

¿Practica algún tipo de ejercicio? El ejercicio es una parte fundamental de mi vida. Hago deporte casi todos los días. Corro, monto en bici, hago pesas, camino por la montaña, practico yoga, y acabo de empezar a tomar clases de tenis.

¿Sabe cocinar? Sí. Alguien que no sepa cocinar me parece alguien sospechoso.

Si el Reader’s Digest le encargara escribir uno de esos artículos sobre «un personaje inolvidable», ¿a quién elegiría? Mi madre. O la madre de mi madre.

¿Cuál es en cualquier idioma la palabra más llena de esperanza? Amor.

¿Y la más peligrosa? Amor.

¿Alguna vez ha querido matar a alguien? Todavía no.

¿Cuáles son sus tendencias políticas? Azules.

Si pudiera ser otra cosa ¿qué le gustaría ser? Arquitecto brutalista.

¿Cuáles son sus vicios principales? El tiempo, el silencio, y los martinis.

¿Y sus virtudes? Saber escuchar.

Imagine que se está ahogando. ¿Qué imágenes, dentro del esquema clásico, le pasarían por la cabeza? Imágenes de una película de Buñuel.

T. M.