jueves, 8 de agosto de 2013

Entrevista capotiana a Germán Sierra

En 1972, Truman Capote publicó un original texto que venía a ser la autobiografía que nunca escribió. Lo tituló «Autorretrato» (en Los perros ladran, Anagrama, 1999), y en él se entrevistaba a sí mismo con astucia y brillantez. Aquellas preguntas que sirvieron para proclamar sus frustraciones, deseos y costumbres, ahora, extraídas en su mayor parte, forman la siguiente «entrevista capotiana», con la que conoceremos la otra cara, la de la vida, de Germán Sierra.

Si tuviera que vivir en un solo lugar, sin poder salir jamás de él, ¿cuál elegiría?
Es físicamente imposible permanecer en el mismo lugar durante mucho tiempo.
¿Prefiere los animales a la gente?
Prefiero a las personas, aunque en grupos reducidos, por favor.
¿Es usted cruel?
Sólo si lo exige el guión.
¿Tiene muchos amigos?
Para el estándar tradicional, bastantes. Para el estándar Facebook, creo que no son demasiados.
¿Qué cualidades busca en sus amigos?
Ninguna. Prefiero a los amigos sin cualidades.
Suelen decepcionarle sus amigos?
No. Al contrario, a menudo me sorprenden muy favorablemente.
¿Es usted una persona sincera? 
Ahora mismo estoy mintiendo.
¿Cómo prefiere ocupar su tiempo libre?
Depende de en qué haya ocupado el resto de mi tiempo: en general, leer, viajar, pasear, tuitear... O simplemente no hacer nada.
¿Qué le da más miedo?
El miedo mismo. El sufrimiento de la gente a la que amo. El mismo miedo.
¿Qué le escandaliza, si es que hay algo que le escandalice?
Creo que nada. El escándalo ya no es más que una estrategia publicitaria que ha quedado obsoleta.
Si no hubiera decidido ser escritor, llevar una vida creativa, ¿qué habría hecho?
La literatura es una de mis actividades. Aunque no escribiera, seguiría investigando y enseñando, que es a lo que dedico la mayor parte de mi tiempo. Cualquier actividad humana es "creativa". Cada vez más, lo son actividades que no suelen ser etiquetadas como "creativas" o que incluso se definen como "no creativas".
¿Practica algún tipo de ejercicio físico?
Últimamente, jugar con un pequeño amigo de casi año y medio de edad.
¿Sabe cocinar?
Puedo preparar algún plato sencillo, pero, para mí, cocinar es algo mucho más serio.
Si el Reader’s Digest le encargara escribir uno de esos artículos sobre «un personaje inolvidable», ¿a quién elegiría?
Darwin, Leibniz, Bernini.
¿Cuál es, en cualquier idioma, la palabra más llena de esperanza?
Ven.
¿Y la más peligrosa?
Las palabras solo son peligrosas cuando vienen en grupo. Por eso escribimos.
¿Alguna vez ha querido matar a alguien?
No. El asesinato está sobrevalorado.
¿Cuáles son sus tendencias políticas?
No puedo identificarme con ninguna de las tendencias políticas actuales. Mis ideas políticas están permanentemente en construcción. Las instituciones y las ideologías del presente se derivan de circunstancias sociales que han desaparecido, se han vuelto irrelevantes o convertido en simulacros, de modo que no representan otra cosa que a sí mismas.
Si pudiera ser otra cosa, ¿qué le gustaría ser?
Cthulhu.
¿Cuáles son sus vicios principales?
Mi incapacidad para tomarme lo suficientemente en serio.
¿Y sus virtudes?
Mi incapacidad para tomarme demasiado en serio.
Imagine que se está ahogando. ¿Qué imágenes, dentro del esquema clásico, le pasarían por la cabeza?
Rosebud.

T. M.