Foto: una lengua de hielo en Islandia, 2010
Hace escasos
días el primer editor de Hildur (en
2009, en la desaparecida editorial sevillana Paréntesis), se hacía eco con gran
amabilidad de mi novela con la entrada titulada “La segunda vida de Hildur”. Y poco después me llegaba este
súper regalo navideño: una lectura extraordinariamente profunda y comprometida
de Gerardo Vázquez, desde su blog Varado en la Llanura.
Me emocionó que alguien se haya adentrado de esa manera –tanto desde lo literario como desde lo musical– en un texto que en su día tuvo el honor de recibir comentarios enjundiosos y extensos de Mauricio Wiesenthal, José María Conget, José Balza, José Ángel Cilleruelo y Germán Gullón, que van apareciendo estas semanas en el Facebook de la editorial Piel de Zapa.
Me emocionó que alguien se haya adentrado de esa manera –tanto desde lo literario como desde lo musical– en un texto que en su día tuvo el honor de recibir comentarios enjundiosos y extensos de Mauricio Wiesenthal, José María Conget, José Balza, José Ángel Cilleruelo y Germán Gullón, que van apareciendo estas semanas en el Facebook de la editorial Piel de Zapa.